Té verde con galletas de avena

Acá en el norte
la cocina me acoge

hay un comedor pequeño
esta en casa del padre y la madre
desde que tengo 15 años

me acuerdo de copiapó
de estar sentada estudiando
algebra para Juan Vilches

ahora sentada
busco pasajes para Puerto Montt
para el 8 de junio

la música sale del computador
se mete en mi cabeza
y hace nido en mi corazón

hay hartas cosas que sentir
un silencio que disfrutar
palabras que recordar

cansancio de domingo
hora de soñar

_

Kilpue (anarco romanticismo)

Dormí con un parche de foca en la cara

me afloran dolores antiguos
que se apoderan de mi cara


la Cristi curo mi herida
con un parchecito

Me fume un porrito con el Nico
y conversamos hasta taaaarde
me hablo de la organización comunal
entreteniiiiido

hablamos del amor
de lo olvidado que esta


podrido sistema
que nos hace creer que
esta mal sentir


Me dio sueño despues de tanta chachara entretenida
comimos pancito y tomamos té

Dormí bien en la pieza del Pablo
muy abrigadita
con las frazadas que instalo la Cristi

el Jko esta enfermo
de noche escuchaba su pecho
que rugía

Tengo ganas de mirar el mar, la espuma de la orilla
esa es la parte que mas me gusta de la playa

con la Cristi parece que vamos mañana
aún nada seguro

Ahora trabajo
en el texto para el 4 de Junio
por un feminismo sin mujeres


Escribo y reivindico a las betarragas
el pan integral
saludar al sol primitivamente

Riendo con la canción melodramatica
que tocaban en la micro
cuando veníamos
con la Cristi de vuelta del Belloto

Reivindicar el romance feliz
sin dolor de cabeza
sino que con libertad de conciencia

Por un feminismo sin mujeres culposas
por un feminismo sin competencias genericas

los sentimientos anarcos romanticos
son los sentimientos
que me recuerdan que esta todo muy bien

es la ciudad y su frustrante ansiedad de cemento
la que bloquea mi alma silvestre

acá en Kilpué recupero la tranquilidad
las certezas y el presente en calma

Olvidar que se vive en la ciudad del capital

Articular las palabras
predisponerse al habla

aspirar a la liberación
del espíriru
de la carne

de las ideas atrapadas
en las estructuras
patriarcales
que oprimen el deseo

Yoga
Betarragas
Pan Integral
Sesamo Molido
Quinoa

Y Por supuesto la
Bicicleta!

Bicicleta!
Bicicleta!
Bicicleta!

Viernes 14 de Mayo

La coronilla y el equilibrio

La bici bajo la lluvia
el agua que lava los malos pensamientos

La lluvia cae de arriba abajo
las micros hoy me mojaron entera

yo me reí
(es mejor que llorar)

La coronilla y soltar
liberar las ganas
atrapar la respiración
en una inspiración profunda
desinteresadamente intensa

Un feminismo esoterico
es el que le da sentido
al discurso vaginal
de sentir más que pensar

No hay razón
que sustente
al hervidero de esta alma

Hay lluvia
que limpia

Yo me quede parada un rato
en Antonio Varas
en la esquina de Vasconia

el agua
me paso por arriba
se metió por los lados
y se vació por los pies


ayer me dieron ganas de correr
menos mal que hoy día había agua
entonces pensé mas en nadar
que en correr


Espero al lalo

me prometió un porro
para convesar de las bicicletas bajo la lluvia

Miércoles 12 de Mayo

Estamos cocinando
el fanzine de Marriage with my bicicle
en la editorial que imaginamos

Le pedí al maestro shawarma que escribiera
sobre la GRAN BICICLETA
él esta muy cerca de la
iluminación biciclistística



Yo profundizaré en la relación
actual que tengo con Marco


Don Ale
iluminará con la presentación
algo así como el puntapie inicial

Se me pega el lenguaje
de la colonización que se avecina


fui a la vega hoy día
y el caballero de las zanahorias
hablaba del PARTIDO
yo le pregunté
Qué partido?

y el socio quedo paralizado
En qué planeta vive ud? Me dijo mirándome fijamente

yo, con una GRAN sonrisa vegetariana
le contesté: En el planeta de l*s mutantes


Ayer...
me preguntaron
le gustan harto las bicicletas a ud?

yo... contesté:
con harta verborrea
como se me caracteriza

No se si soy mujer o si soy una Bicicleta

LA CENICIENTA Dahl Rolad

¡SI, ya nos la sabemos de memoria!,
me diréis. Y, sin embargo, de esta historia
tenéis una versión falsificada,
rosada, tonta, cursi, azucarada,
que alguien con la mollera un poco rancia
consideró mejor para la infancia...

El lío se organiza en el momento
en que las Hermanastras de este cuento
se marchan a Palacio y la pequeña
se queda en la bodega a partir leña.

Allí, entre los ratones llora y grita,
golpea la pared, se desgañita:

¡Quiero salir de aquí! ¡Malditas brujas!

¡¡Os arrancaré el moño por granujas!!.

Y así hasta que por fin asoma el Hada
por el encierro en el que está su ahijada.

¿Qué puedo hacer por ti, Ceny querida?
¿Por qué gritas así? ¿Tan mala vida
te dan esas lechuzas? . ¡Frita estoy
porque ellas van al baile y yo no voy! .

La chica patalea furibunda:
¡Pues yo también iré a esa fiesta inmunda!

¡Quiero un traje de noche, un paje, un coche,
zapatos de charol, sortija, broche,
pendientes de coral, pantys de seda
y aromas de París para que pueda
enamorar al Príncipe en seguida
con mi belleza fina y distinguida! .

Y dicho y hecho, al punto Cenicienta,
en menos tiempo del que aquí se cuenta,
se personó en Palacio, en plena disco,
dejando a sus rivales hechas cisco.

Con Ceny bailó el Príncipe rocks miles
tomándola en sus brazos varoniles
y ella se le abrazó con tal vigor
que allí perdió su Alteza su valor,
y mientras la miró no fue posible
que le dijera cosa inteligible.

Al dar las doce Ceny pensó: Nena,
como no corras la hemos hecho buena ,
y el Príncipe gritó : ¡No me abandones! ,
mientras se le agarraba a los riñones,
y ella tirando y él hecho un pelmazo
hasta que el traje se hizo mil pedazos.

La pobre se escapó medio en camisa,
pero perdió un zapato con la prisa.

El Príncipe, embobado, lo tomó
y ante la Corte entera declaró:
¡La dueña del pie que entre en el zapato
será mi dulce esposa, o yo me mato! .

Después, como era un poco despistado,
dejó en una bandeja el chanclo amado.

Una Hermanastra dijo: ¡Esta es la mía!,
y, en vista de que nadie la veía,
pescó el zapato, lo tiró al retrete
y lo escamoteó en un periquete. Y
en su lugar, disimuladamente,
dejó su zapatilla maloliente.

En cuanto salió el Sol, salió su Alteza
por la ciudad con toda ligereza
en busca de la dueña de la prenda.

De casa en casa fue, de tienda en tienda,
e hicieron cola muchas damiselas
sin resultado. Aquella vil chinela,
incómoda, pestífera y chotuna,
no le sentaba bien a dama alguna.

Así hasta que fue el turno de la casa
de Cenicienta... ¡Pasa, Alteza, pasa! ,
dijeron las perversas Hermanastras y,
tras guiñar un ojo a la Madrastra,
se puso la de más cara de cerdo
su propia zapatilla en el pie izquierdo.

El Príncipe dio un grito, horrorizado,
pero ella gritó más: ¡Ha entrado! ¡Ha entrado!
¡Seré tu dulce esposa! . ¡Un cuerno frito! .

¡Has dado tu palabra, Principito,
precioso mío! . ¿Sí? rugió su Alteza.

¡Ordeno que le corten la cabeza! .

Se la cortaron de un único tajo y
el Príncipe se dijo: Buen trabajo.

Así no está tan fea . De inmediato
gritó la otra Hermanastra: ¡Mi zapato!
¡Dejad que me lo pruebe! . ¡Prueba esto! ,
bramó su Alteza Real con muy mal gesto
y, echando mano de su real espada,
la descocorotó de una estocada;
cayó la cabezota en la moqueta,
dio un par de botes y se quedó quieta...

En la cocina Cenicienta estaba
quitándoles las vainas a unas habas
cuando escuchó los botes -pam, pam, pam
pam, del coco de su hermana en el zaguán,
así que se asomó desde la puerta
y preguntó: ¿Tan pronto y ya despierta? .
El Príncipe dio un salto: ¡Otro melón! ,
y a Ceny le dio un vuelco el corazón.

¡Caray! -pensó-. ¡Qué bárbara es su alteza!
Con ese yo me juego la cabeza...

¡Pero si está completamente loco! .
Y cuando gritó el Príncipe: ¡Ese coco!
¡Cortádselo ahora mismo! , en la cocina
brilló la vara del Hada Madrina.

¡Pídeme lo que quieras, Cenicienta,
que tus deseos corren de mi cuenta!
¡Hada Madrina -suplicó la ahijada-,
no quiero ya ni príncipes ni nada
que pueda parecérseles! Ya he sido
Princesa por un día. Ahora te pido
quizá algo más difícil e infrecuente:
un compañero honrado y buena gente.
¿Podrás encontrar uno para mí,
Madrina amada? Yo lo quiero así ...
Y en menos tiempo del que aquí se cuenta
se descubrió de pronto Cenicienta
a salvo de su Príncipe y casada
con un señor que hacía mermelada.
Y, como fueron ambos muy felices,
nos dieron con el tarro en las narices

Kilpue, Metrotren y Almendras en Bolsita

la primera vez que fui a la V región
tenia como 8 años


fuimos a una playa
y había una chimenea adentro de la casa


Tenía ganas de ir al baño desde que salimos
de Stgo.
este último dato lo recuerdo
muy traumático



Ví desde lejos el Puerto
el Congreso
y los cerros con casas de piratas enlatadas



Regresé a la costa central
a sacar fotos entremedio de los cerros
el mercado y las casas medio chuecas
con olor a humedad veneciana

Ahí tenia 19
vivía en San Alfredo

y me quedaban hartos años en
esta ciudad de hormigon armado
llamada Santiago de Chile

Volví todos los años
como manda evangélica

Tomaba desayuno en lugares que recortaba
de las revistas
y me tomaba largo tiempo
para mirar el mar desde las alturas

Ahora ya estoy camino a Kilpue
a buscar un pedazo de tierra
e instalar mi máquina de coser
heredada de mi guelita Amalia
en un lugar cerca del Sol

lejos del ruido
y sobre todo
lejos de este capitalismo kitsh
que me tiene harta
cansada
abatida
y nerviosa

Yo apelo a
un sentimiento genuino
sin proceso intelectual
mas visceral
y sobre todo Uterino

desde ese sentimiento emigraré
a la V
con el vientre místico
generoso y relajado

Marco della Bicicleta
insiste...
no es posible construir
en una ciudad tan tan
atiborrada de violencia gratuita

la semana pasada
me gritaron como 7 veces
TONTAAAAA

yo...
me quedo tiesa
ya no grito de vuelta

es que, que sentido tiene apelar
a la violencia de vuelta...

prefiero imaginar mi vida en provincia
y coser a maquina
mirando al árbol
desde mi ventana

Negris_

1 de Mayo


Sábado feriado de parque compartido
luego de un viernes por la noche
en que pedaleamos en manada pedalera

Despertar temprano el sábado fue un acto heroico
la noche había estado cargada de emociones de pedal

En La Tola (bellavista)
había una orgía biciclitística
multitud de pedales

Acceder a ese lugar
fue como ingresar a un orificio
en medio de esta urbe de hormigón

Vendrán más talleres
así lo ha manifestado
la GRAN BICICLETA